Al cumplir el primer mes de vida, los bebés empiezan a mostrar una gama de habilidades y respuestas que marcan el comienzo de su desarrollo. Aunque al principio parezca que sus actividades se limitan a comer, dormir, llorar y necesitar cambios de pañales, hay varios hitos importantes que los padres y cuidadores pueden observar.
¿QUÉ ES?
Los logros del desarrollo en el primer mes de vida son indicativos de cómo los bebés comienzan a interactuar más conscientemente con su entorno. Estos incluyen avances en la motricidad, la visión y la audición, así como en el sentido del olfato y el tacto. Estos logros son signos de que el sistema nervioso del bebé está madurando y que están comenzando a explorar el mundo a su alrededor.
¿QUÉ HACER COMO PADRES?
Estimulación visual y auditiva: Dado que los bebés a esta edad pueden enfocar objetos a una distancia de 20 a 30 cms y prefieren los patrones de alto contraste y los rostros humanos, los padres pueden estimular su desarrollo visual hablándoles de cerca y mostrándoles juguetes con estos patrones. La audición también está totalmente desarrollada, por lo que hablar y cantar al bebé puede fomentar su reconocimiento de sonidos y voces.
Estimulación táctil: La preferencia por las sensaciones suaves sugiere la importancia del contacto físico, como acariciar suavemente al bebé o envolverlo en telas suaves para confortarlo.
Fomentar el movimiento: Aunque sus movimientos puedan parecer erráticos, llevar sus manos a su boca y mover la cabeza son importantes para su desarrollo motor. Los padres pueden fomentar estos movimientos colocando al bebé boca abajo bajo supervisión para fortalecer su cuello y hombros, siempre cuidando de su seguridad.
¿Cuándo pedir ayuda profesional?
Si en las semanas siguientes al primer mes de vida se observa alguno de los siguientes signos, es recomendable consultar con un pediatra:
Alimentación deficiente: Si el bebé succiona poco y come lentamente, puede ser indicativo de problemas de alimentación que requieren atención.
Respuesta visual limitada: La incapacidad para enfocar o seguir objetos, o no parpadear ante una luz brillante, podría señalar problemas de desarrollo visual.
Rigidez o flacidez en extremidades: Un tono muscular anormalmente alto o bajo en brazos y piernas necesita ser evaluado por un profesional.
Temblores en la mandíbula: Si la mandíbula del bebé tiembla constantemente, incluso cuando no está llorando o excitado, es importante mencionarlo al pediatra.
Falta de respuesta a sonidos fuertes: Esto puede indicar problemas auditivos o de desarrollo neurológico.
Observar y responder a los logros y necesidades de desarrollo de su bebé en el primer mes es crucial. Estas acciones no solo apoyan su crecimiento y bienestar sino que también ayudan a fortalecer el vínculo entre el bebé y sus cuidadores. Ante cualquier duda o preocupación, consultar con un pediatra siempre es la mejor opción para asegurar el desarrollo saludable del bebé.
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